SRI AUROBINDO
Según Sri Aurobindo, el ser humano actual es un ser de transición pues la Naturaleza aún no ha terminado su obra con él, en cambio si ha terminado con el resto de los animales para los cuales sólo ha previsto algunos cambios para su mejor adaptación al medio en el que viven.
Si la Naturaleza hubiese terminado su obra con nosotros el resultado sería un deleite en la satisfacción misma de los instintos básicos. Así podemos plantear que la insatisfacción que percibimos, no es un fracaso ni de nosotros ni de la Naturaleza.
La insatisfacción que percibimos es el medio que Ella, la Naturaleza, utiliza para mostrarnos que aún la obra continúa y para animarnos a participar conscientemente en una transformación o mutación, que nos conducirá, del animal humano, al Ser Humano.
Dicha transformación o mutación no la creamos nosotros, no la decidimos nosotros como creería el egocéntrico hombre medio, es un designo Divino. No somos los creadores de eso, somos los invitados a eso… y en nosotros está la posibilidad de abrirnos a la influencia de lo Alto o bien permanecer en la oscuridad del pasado y el presente, retrasando dicho proceso.
El cambio se puede percibir como una llamada, una llamada que nos habla al principio en voz baja y que progresivamente se convertirá en una voz alta y clara, que tendrá el rostro de una Presencia interior. Presencia que en el silencio todo lo llena, todo lo colma y donde sus señas de identidad son:
Paz… incluso en las dificultades.
Amor… dar sin necesidad de recibir.
Ananda… gozo, plenitud infinita.